Pasos para crear un «concepto» de tienda
¿Cómo empezar a crear un concepto de tienda que aún no existe?
El proceso de creación y conceptualización de una tienda no es un trabajo en automático y similar para cada cliente. En Tribeka nos gusta trabajar de la mano del cliente, viajar hacia los inicios de la marca, conocer en profundidad los valores y el producto así como las personas que trabajan en la compañía para que la tienda que creemos respire lo que realmente es la marca.
En algunos sectores lo llaman “recoger briefing”. Es el momento en el que el equipo que conforma Tribeka se sienta con el cliente para recoger toda la información posible que nos sirva a la hora de enfocar lo que conocemos como “un nuevo concepto de tienda”.
Los cuatro pilares del briefing:
Como hemos adelantado, conocer al cliente y su producto en profundidad es el primer paso para que el trabajo de diseño de tienda que realicemos sea sólido y eficaz. Estos son para Tribeka los cuatro puntos indispensables a tener en cuenta:
La marca:
Descubrir qué historia se esconde detrás de la marca y su fundación. Quién lidera, ahora mismo el proyecto y cuál es su misión tanto a nivel valores como producto es el primer step a tener en cuenta.
El producto:
Algunas tendencias marketinianas aseguran que el producto es ‘el rey’ y que todo debe girar en torno a éste. En Tribeka consideramos que es parte importante pero no lo es todo. El producto sin unos valores que lo acompañen y unas personas que le den voz y personalidad, no se distingue en un mercado saturado de inputs. Así que para nosotros un primer paso consiste en saber qué producto se vende pero también cómo se vende.
En un segundo paso valoramos el producto y de qué manera se diferencia de la competencia. Entre otros puntos nos gusta conocer el grado de satisfacción que la compañía tiene versus el producto que comercializa, cuáles son las cualidades del mismo y sus puntos diferenciales. También son importantes, en este punto del ‘brief’ datos como el stock, la estacionalidad del producto, el precio y los posibles cambios a los que puede someterse en un corto-medio plazo.
El target:
Una tienda no existe si no hay cliente, por este motivo para nosotros es de vital importancia que conozcamos cuál el es público objetivo usuario/consumidor del producto: su edad, situación económica y familiar, dónde vive, qué aficiones y gustos tiene y, principalmente, cuál es el motivo por el que se desplazaría a la tienda de la marca si ésta tuviera una.
¿Qué hace la competencia?
Una vez tenemos sobre la mesa toda la información necesaria sobre nuestro cliente, llega el momento de ver qué hacen nuestros competidores más cercanos así como distinguir entre las buenas y las malas praxis para optimizar nuestro diseño y diferenciarnos.
¡Empezamos!
El primer paso para abordar el concepto de tienda que, tanto nosotros como el cliente, estamos buscando es elaborar un “moodboard”. Se trata de un collage de materiales, imágenes de inspiración, sketches de aproximación de alguna de las zonas del futuro espacio, muebles, etc.
Contamos con una experiencia de más de 25 años con más de 700 proyectos realizados a nuestras espaldas en 30 países. Y siempre hemos trabajado así, con el fin de crear un nuevo concepto de tienda: un espacio que represente al producto que vendemos y que acoja al cliente que deseamos, un espacio que sorprenda, impacte y emocione.